Edición:
Leticia Delgado
leticiadelgado@thalamusmagazine.com
Barcelona/Sevilla 24/03/2022.

Antonio E. Ojeda, el fotógrafo de El Viso del Alcor (Sevilla), es completamente autodidacta. Su primera cámara fue una Zenit analógica. Ha conseguido crear un estilo propio y distinguible en el que cada encuadre se convierte en un juego de geometrías y cada pedazo de calle en una suerte de rompecabezas. Arquitectura y minimalismo, luz y sombra. Se siente atraído por el aquí y el ahora, ese instante fugaz que no se vuelve a repetir. No necesita intervenir en la escena, le basta con su mirada para captar los múltiples planos que ofrece la realidad.
No sabría describir exactamente mi punto de vista o mi punto de partida, ese con el que inmortalizo lo que no sucede más. Sí sé cómo me gustaría que fuese: como el de alguien que, desde una ventana, mira la calle y la vida pasar en el poema Tabaquería de Álvaro de Campos.

No tengo ni he tenido nunca héroes o heroínas pero, de tenerlos, seguramente habrían salido de la literatura o el cine: Bloom en Ulises, Oliveira en Rayuela o Walser en El Paseo.

Sobre mis inicios en la fotografía puedo decir que siempre me había atraído como disciplina artística, pero me veía más como un observador que como un hacedor de fotos. Los pasos se fueron dando poco a poco. El empuje definitivo se produjo al descubrir que la fotografía es magia y nos permite ver una realidad paralela.

Los fotógrafos debemos hablar a través de nuestras fotografías. Tienen que ser ellas las que nos definan, las que cuenten nuestra historia, las que digan lo que tal vez no somos capaces de decir con palabras.

Tengo la sensación de que el tiempo de pandemia ha sido una oportunidad perdida, tanto a nivel personal como global.

El mayor logro, el mayor mérito, el mayor reto, debe ser siempre el que está por hacer o enfrentar.

A alguien que está empezando le aconsejaría que buscara y buscara su propia personalidad. Lo demás aflorará si tiene que aflorar.

Las redes sociales han sido fundamentales para conocer y darme a conocer, sobre todo al comienzo. Son herramientas muy útiles si eres tú quien las utiliza a ellas y no al revés.

♦
THALAMUS MAGAZINE // AÑO 2022
editorial@thalamusmagazine.com
⊗